NEURODIVERGENCIA

Trastorno del espectro autista (TEA)

¿Qué es el TEA?

El trastorno del espectro autista es una condición vinculada al desarrollo cerebral que influye en cómo una persona percibe el mundo y se relaciona con los demás, lo que genera dificultades en las interacciones sociales y la comunicación. Además, las personas con TEA presentan patrones atípicos de actividad y comportamiento. Es habitual que presenten un comportamiento inflexible, muestren gran atención a los detalles o presenten reacciones poco habituales a las sensaciones. El término ‘’espectro’’ se refiere a un amplio abanico de síntomas y gravedad.

Las personas con TEA pueden presentar comorbilidades: epilepsia, depresión, ansiedad y trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH); así como comportamientos problemáticos, como dificultad para dormir y autolesiones. El nivel intelectual varía mucho, y va desde un deterioro profundo hasta casos con aptitudes cognitivas altas.

Se le conoce como un trastorno del desarrollo porque generalmente los síntomas aparecen durante los primeros dos años de vida, y por lo tanto es común que el diagnóstico se realice en la primera infancia, aunque se puede diagnosticar a cualquier edad

Un estudio publicado en Autism Research cifra en 1 de cada 100 los niños con autismo. La Organización Mundial de la Salud indica que este dato supone una cifra media, pues la prevalencia observada varía considerablemente entre diferentes investigaciones. Así, en algunos ensayos bien controlados se ha observado mayor prevalencia. Y además, la OMS destaca que en países de ingresos y medianos, las cifras son hasta ahora desconocidas.

La Confederación Autismo España estima que hay más de 470.000 españoles con autismo. En el caso de Cataluña, serían 75.000 las personas con autismo, afirma la Federació Catalana d’Autisme.

Causas del TEA

A día de hoy no se conoce el origen del autismo, pero se sabe que es genético y que determinados factores ambientales (ciertas características de los progenitores o acontecimientos perinatales) contribuyen al desarrollo y evolución de la condición.

Características de las personas con autismo

Respecto a las habilidades de comunicación, las personas con TEA pueden experimentar desafíos al:

  • Comprender mensajes transmitidos de forma verbal o interpretar el significado figurado del lenguaje, como bromas, metáforas, ironías o dobles sentidos.
  • Entender correctamente la comunicación no verbal, incluyendo el contacto visual, gestos, postura corporal o expresiones emocionales.
  • Identificar temas apropiados según el contexto o el interés de la persona con la que están conversando.
  • Ajustar su lenguaje a la situación, a veces utilizando expresiones demasiado formales o un tono poco habitual.

En cuanto a las relaciones sociales, pueden enfrentarse a dificultades como:

  • Desenvolverse en ciertas situaciones sociales y comprender normas sociales implícitas.
  • Interpretar las emociones, deseos o intenciones de los demás y aplicar este conocimiento en las interacciones sociales.
  • Expresar sus emociones de manera adecuada según el contexto.

Por otra parte, suelen presentar dificultades para adaptarse a los diferentes contextos sociales. Lo que se traduce en resistencia a los cambios en las rutinas o entorno; necesidad de apoyo frente a situaciones nuevas o desconocidas; patrones de comportamiento rígidos; y repertorio de intereses limitado, intenso y específico.

En otros casos, las personas con TEA sufren alteraciones en el procesamiento de los estímulos sensoriales. Por ello, pueden manifestar un malestar intenso a ciertos sonidos, olores, sabores o texturas; indiferencia aparente al dolor o la temperatura; o la búsqueda de estímulos a través de la actividad física (saltos, giros, balanceos, aleteos).

¿Necesitas ayuda?

Estamos para atenderte. Para cualquier consulta no dudes en contactarnos.

es_ESEspañol
Powered by TranslatePress